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27 mayo, 2022
(Fuente imagen: Climate change scenarios)
Cinco posibles escenarios socio-económicos para el futuro
El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) dada la emergencia climática actual, ha establecido cinco posibles escenarios socio-económicos para el futuro que describen la economía global y las emisiones del futuro. Estos escenarios permiten hacer predicciones de emisiones de CO2 y de aumentos de la temperatura media global, pero también de sus consecuencias y de las vías para adaptarnos y mitigarlas.
El primero de los escenarios, SSP1: sostenibilidad, creo que es una linda utopía. En esta feliz fantasía todo el mundo cambia a energías renovables y modos de vida sostenibles, se invierte en salud y educación y la población se estabiliza a mitad de siglo tendiendo a la igualdad.
Por mucho que me encantaría vivir en un mundo cuyo futuro es el primer escenario, lo veo imposible. Lo que estamos viendo es que las desigualdades sociales no hacen más que aumentar en todo el mundo, aceleradas por la reciente pandemia mundial, tal y como muestra el informe sobre la desigualdad mundial de 2022. Aunque cada vez más países, como España, están apostando por energías renovables; el escenario 1 necesitaría que todo el mundo abandonara inmediatamente los combustibles fósiles y para países como China, que el carbón es su principal fuente de energía, es imposible hacerlo tan rápido como se necesitaría.
El segundo de los escenarios, SSP2: el camino del medio, creo que es una posibilidad un poco más realista. En este escenario en el que se pretende la sostenibilidad pero no se llega, la economía, la sociedad y la tecnología siguen los patrones históricos. Se trabaja poco a poco en el desarrollo sostenible pero no se llega a lo necesario para mitigar los efectos del cambio climático y el medio ambiente sufre graves consecuencias. La población mundial se estabiliza en la segunda mitad del siglo y aunque las desigualdades sociales persisten van mejorando poco a poco. Me encantaría creer que este escenario será el futuro para nosotros, pero la tendencia creciente de las desigualdades sociales me lo impide.
El tercer escenario, SSP3: rivalidad regional, es una posibilidad escalofriante que nos hace volver a principios de siglo XX y los nacionalismos. Es un sálvese quien pueda en el que aumentan las desigualdades sociales y no se aborda el desarrollo sostenible de manera global, provocando consecuencias catastróficas en el medio ambiente. En las políticas occidentales estamos viendo cómo están aumentando los partidos ultraconservadores y nacionalistas, lo que me inclina a pensar en este escenario para nuestro futuro. En este escenario la población es alta, y en las tendencias actuales no hace más que aumentar, sobre todo en países asiáticos. Sería necesario que estos países invirtieran en educación y salud o impusieran estrictas políticas de natalidad como hizo China. Pero este tipo de políticas trajeron muchas consecuencias negativas, creando todavía más desigualdades sociales, por lo que no son una solución. En muchos países asiáticos sigue habiendo mucha población analfabeta y siguen confiando en la medicina tradicional porque no tienen acceso a otra cosa, y no creo que esto vaya a cambiar pronto.
El cuarto escenario, SSP4: desigualdad, es una posibilidad igual de espeluznante que la anterior. En este escenario también aumentan las desigualdades sociales, pero se diversifica el sector energético y hay un mayor desarrollo tecnológico que en el caso anterior, aunque es moderado e incapaz de atender a las necesidades de la crisis climática de manera global.
El quinto escenario, SSP5: desarrollo impulsado por combustibles fósiles, es una posibilidad demasiado cientifista para mi gusto que confía en que la ciencia y la tecnología nos van a salvar, aunque de momento sigamos tirando de combustibles fósiles para fomentar el desarrollo económico. Me cuesta creer en este escenario porque me parece confiar en castillos en el aire con posibles futuras soluciones milagrosas que arreglarán todos nuestros problemas.
En conclusión, por mucho que me encantaría creer que un escenario 1 o incluso 2 van a ser nuestro futuro, las tendencias actuales de consumo energético y desigualdades sociales me lo impiden. El sistema capitalista en el que se basa la economía mundial propicia las desigualdades sociales, los ricos cada vez son más ricos y los pobres cada vez son más pobres. Este sistema se basa en los combustibles fósiles como principal fuente energética y eso no creo que cambie hasta que no estén cerca de agotarse y ya no sean rentables. Aunque cada vez más países son conscientes de la gravedad de las consecuencias del calentamiento global y están haciendo una transición energética, para otros no es posible porque no tienen el suficiente desarrollo tecnológico para abastecer a toda su población. Por todo ello, veo mucho más factibles los escenarios 3 o 4.
Referencias:
IPCC’s Assessment Report on climate change AR6 (2021)
Informe sobre la desigualdad mundial de 2022