Blog

Historia de un protón

14 marzo, 2022

Máster de cultura científicaTierra y Vida

Se dice que cuando yo todavía no existía, no había nada, no existía todavía la materia. Lo único que existía era el espacio-tiempo, que por algún motivo se expandía. Hay quién dice que era una especie de energía llamada inflatón, que hacía que el espacio-tiempo se estirara cada vez más rápido. Esta época es confusa y no está claro qué pasó ni por qué. Ninguno de los míos ha vivido en esa época, de todas maneras, yo seguiré preguntando por ahí a ver qué averiguo.

¿Inflación?
¿Inflación?

Lo que parece estar claro es que en algún momento toda esta energía se transformó en materia, podríamos llamar a esto el inicio del año 0 de la existencia de mis antecesores, el Big Bang. Se dice que los primeros tiempos fueron muy caóticos, mucha energía, mucho desfase. Fíjate que las partes de mi cuerpo estaban todas desperdigadas por ahí, quarks up y down chocando con todo aquel que se pusiera en su camino a muy altas temperaturas.

Big Bang
Big Bang

Yo llegué cuando las cosas empezaron a calmarse, la juerga fue tan intensa que no duró ni un segundo. Me da pena haberme perdido aquello, tuvo que ser divertido tanto choque y tanta partícula. Cuando se enfrió el ambiente mis partes, dos quarks up y uno down, dejaron de vagar de un lado a otro sin rumbo y se juntaron. Mis primos los neutrones llegaron por la misma época. Si me paro a escuchar a mis quarks puedo imaginarme lo que se sentía en aquella sopa muy caliente, me lo imagino como una fiesta en una piscina.

Sopa primordial
Sopa primordial

Yo tampoco puedo quejarme, mis primeros tiempos también fueron alocados. Unos tres minutos de un lado a otro, chocando con mis gemelos y primos, la cosa todavía estaba caliente. Lo mismo chocabas hoy con uno, mañana con otro, y no los volvías a ver jamás. Hasta que poco a poco empezó a refrescar.

Protones y neutrones
Protones y neutrones

El espacio tiempo se siguió estirando, lo que hizo que nos fuéramos viendo cada vez menos. Decidí sentar la cabeza y formar una familia con algunos de mis primos y hermanos. Una fuerza en nuestro interior, llamada fuerza nuclear fuerte, nos mantenía unidos.

Núcleos atómicos
Núcleos atómicos

Así pasamos años, se estaba a gusto, de vez en cuando nos encontrábamos con otras familias o partículas solitarias y lo pasábamos bien. A los 300.000 años decidimos aumentar la familia, se unieron los electrones. Ellos seguían por ahí solos de fiesta, pero la atracción era irresistible, éramos cargas opuestas. Ahí fue cuando pasamos a llamarnos átomo.

Átomos
Átomos

Unos cuantos años después dejamos de ver a los fotones. Me dio pena, me caían bien, eran lobos solitarios, pero siempre pasaban a saludar cuando te los encontrabas.

Desacople de los fotones
Desacople de los fotones

Cada vez hacía más frío y se pasaba a saludar menos gente nueva. Definitivamente los tiempos de juerga habían terminado. Por suerte, la gravedad hizo que aumentáramos la familia, por mucho que fuera hiciera frío nosotros empezamos a juntarnos cada vez más para recuperar un poco del calor antiguo que todos añorábamos. Vivíamos en una gran comuna llamada estrella. Pasaron millones y millones de años, tantos que perdí la cuenta. Nosotros nos empezamos a montar alguna que otra fiestecilla para recordar viejos tiempos y nuestro átomo fue creciendo. Llegamos a convertirnos en una gran familia llamada átomo de hierro, la mayor familia que podía existir en aquella época.

Formación estelar
Formación estelar

No sé qué pasó exactamente, quizás la fiesta se nos fue de las manos. Aquello fue la bomba, cada vez nos juntamos más y la temperatura subió mucho. Mi átomo de hierro salió disparado y terminamos formando parte de otra estrella que estaba naciendo, el Sol. Pero esta vez estábamos bastante lejos del calor del bullicio central. Así que terminamos dando vueltas alrededor de la estrella juntándonos con nuestros vecinos en una gran roca, el planeta Tierra. Aquí hay familias de todo tipo, más grandes y más pequeñas, los hierro ahora somos una familia mediana.

Planeta Tierra
Planeta Tierra

La verdad es que no se está tan mal, no estoy en la gran fiesta, pero en el centro de la Tierra hace calorcito y se está a gusto. Supongo que pasaré aquí unos cuantos millones de años más, quizás el resto de mi vida. Sólo me gustaría saber qué está pasando últimamente en la superficie, hace tiempo que se comenta que la cosa está agitada, creo que hay parásitos, humanos se hacen llamar.


© 2022 Anisotropia.